Elementos clave para una crianza exitosa: amor, apoyo y comunicación
- Amor como elemento fundamental en la crianza y en cualquier ambiente.
- La generación de hormonas y sustancias químicas beneficiosas en el cerebro.
- Estar presente para brindar apoyo y seguridad en caso de accidentes.
- Crear un ambiente seguro y libre de miedo.
La crianza de los hijos puede ser un desafío abrumador para muchos padres. A veces nos sentimos perdidos, sin saber por dónde comenzar o qué hacer para educar a nuestros hijos de la mejor manera posible.
Es por eso que en este artículo exploraremos los elementos básicos que son fundamentales en la crianza, no solo para el desarrollo de los niños, sino también para fortalecer las relaciones en cualquier ambiente.
El amor y apoyo influyen en el desarrollo de un niño
El primer elemento clave en la crianza es el amor. Un ambiente amoroso, cálido y lleno de confianza es fundamental para el crecimiento y desarrollo de cualquier persona. Cuando los niños se sienten amados y apoyados, su relación con sus padres y con los demás mejora notablemente.
“Yo creo que uno de los temas fundamentales es el amor. Es el amor. Es ese ambiente amoroso, de confianza, cálido, donde cualquier persona se va a desarrollar mejor.”
Yolanda Vallet
Psicoterapeuta Gestalt y Certificada en TDAH
Pero el amor no solo influye en las relaciones, también afecta positivamente nuestro cerebro. Cuando recibimos una sonrisa o un gesto de amor, nuestro cerebro libera sustancias químicas como la serotonina, la oxitocina y la endorfina, generando bienestar y felicidad.
El segundo elemento es el apoyo. Los niños, al igual que cualquier persona, necesitan sentirse aceptados tal como son. Deben tener el espacio para explorar, probar cosas nuevas y equivocarse. Es importante que los padres estén ahí para darles seguridad y ánimo, incluso cuando cometen errores.
Si los niños sienten que tienen un lugar seguro al cual regresar, podrán enfrentar los desafíos con mayor confianza y aprender de sus experiencias.
Estos mismos principios se aplican durante la adolescencia. Los adolescentes también necesitan explorar y descubrir quiénes son, pero sus desafíos y riesgos pueden ser mayores. Es crucial que los padres sigan brindando apoyo, incluso cuando los errores sean más grandes.
Los adolescentes deben poder regresar a un hogar donde se sientan aceptados y donde no sean juzgados, sino que se les brinde orientación y comprensión.
Fomentar la confianza y la comunicación con tus hijos
El tercer elemento es la comunicación. Es fundamental tener canales abiertos de comunicación con nuestros hijos, sin juicios ni críticas. Cuando señalamos y criticamos, generamos agresión y cerramos las puertas de la comunicación.
Es importante escuchar activamente, estar presentes y comprender las necesidades y sentimientos de nuestros hijos.
“La comunicación debe ser bidireccional y considerar las necesidades y sentimientos del otro, en este caso, del niño. De lo contrario, se convertiría en un monólogo, donde sólo hablo y tú solo escuchas y obedeces.”
Yolanda Vallet
Psicoterapeuta Gestalt y Certificada en TDAH
El cuarto elemento es la congruencia. Debemos ser coherentes entre nuestras palabras y nuestras acciones. Si queremos transmitir amor, afecto y respeto, debemos demostrarlo a través de nuestras acciones diarias.
Muchos padres pueden tener dificultades para expresar verbalmente su amor, pero es fundamental encontrar otras formas de demostrarlo, como a través de abrazos, muestras de cariño y apoyo emocional.
Reflexionar sobre nuestras propias experiencias
Por último, es fundamental reflexionar sobre nuestra propia crianza. Muchas veces, repetimos patrones que aprendimos en nuestra infancia, incluso si no fueron los más adecuados. Es importante identificar esos patrones y trabajar en nosotros mismos para poder brindar una crianza más positiva y amorosa a nuestros hijos.
En resumen, la crianza exitosa se basa en el amor, el apoyo, la comunicación, la congruencia y la reflexión personal. Estos elementos no solo son útiles en la relación con nuestros hijos, sino también en cualquier ambiente en el que nos desenvolvemos.
Cuando creamos un ambiente amoroso y empático, nos relacionamos de manera más positiva con las demás personas, fortaleciendo nuestros vínculos familiares, de pareja y sociales.La crianza es una tarea desafiante, pero con estos elementos básicos podemos construir una relación sólida y amorosa con nuestros hijos. ¡Ánimo en este hermoso viaje de la crianza!